El entrenamiento ya no es una opción, sino un hábito innegociable. En el pasado, era fácil hacer excusas y priorizar otras cosas sobre el ejercicio, incluso cuando se ganaba buen dinero. Sin embargo, el orador se dio cuenta de que descuidar su salud física finalmente lo llevó a sentirse "loco" e insatisfecho. Ahora, la mentalidad ha cambiado: independientemente de cómo se sientan, saben que deben hacer alguna forma de entrenamiento cardiovascular o de pesas todos los días. Este compromiso diario con la actividad física se ha convertido en una parte esencial de su rutina, ya no algo que se pueda dejar de lado fácilmente. El orador ha reconocido la importancia de atender sus necesidades básicas, como el ejercicio, para sentirse mejor y funcionar de la mejor manera.

El entrenamiento ya no es una opción, sino una necesidad. En el pasado, era fácil hacer excusas y priorizar otras actividades sobre el ejercicio. Sin embargo, el orador se dio cuenta de que descuidar su salud física tuvo un impacto significativo en su bienestar mental y en su éxito general.

A pesar de ganar un ingreso sustancial de $2 millones el año anterior, el orador se encontró sintiéndose "prácticamente loco" porque no estaba atendiendo sus necesidades básicas. Reconocieron que ganar dinero y perseguir metas externas no era suficiente para lograr una verdadera realización y felicidad.

Ahora, el orador se ha comprometido a priorizar sus entrenamientos diarios, ya sea cardio o entrenamiento con pesas. Entienden que, independientemente de cómo se sientan, deben participar en alguna forma de actividad física todos los días. Este enfoque disciplinado se ha convertido en una parte innegociable de su rutina, ya que han reconocido el profundo impacto que tiene en su salud mental y en su éxito general.

El entrenamiento ya no es una opción, sino una necesidad. En el pasado, era fácil hacer excusas y priorizar otras cosas sobre el autocuidado. Incluso cuando se ganaban $2 millones al año, la falta de actividad física llevó a un deterioro de la salud mental. Ahora, la mentalidad ha cambiado: no importa cómo se sienta uno, la prioridad es participar en alguna forma de entrenamiento cardiovascular o de pesas todos los días. Este compromiso con el autocuidado, incluso con el éxito financiero, es crucial para mantener el bienestar general.

El entrenamiento ya no es una opción opcional, sino un compromiso diario. En el pasado, a menudo hacía excusas y encontraba razones para no hacer ejercicio, a pesar de que ganaba buen dinero. Sin embargo, me di cuenta de que descuidar mi salud física estaba afectando mi bienestar general.

Ahora, he tomado la firme decisión de que, independientemente de cómo me sienta, me involucraré en alguna forma de entrenamiento cardiovascular o de pesas todos los días. Ya sea una sesión rápida de cardio o una rutina completa de levantamiento de pesas, sé que cuidar de mi cuerpo es esencial. Ya no permito que mi estado de ánimo o factores externos dicten mi rutina de ejercicios. Se ha convertido en una parte innegociable de mi horario diario, y estoy comprometido a mantener esta disciplina por el bien de mi salud física y mental.

El entrenamiento ya no es una opción opcional, sino una parte necesaria de mi rutina diaria. En el pasado, a menudo hacía excusas y priorizaba otras actividades sobre el ejercicio, a pesar de que ganaba buen dinero. Sin embargo, me di cuenta de que descuidar mi salud física estaba afectando mi bienestar general.

Ahora, me acerco a mi régimen de entrenamiento con una mentalidad diferente. Independientemente de cómo me sienta, sé que necesito participar en alguna forma de actividad física, ya sea cardio o entrenamiento con pesas, todos los días. Este compromiso con mi salud se ha convertido en una parte innegociable de mi vida, y he descubierto que ha tenido un impacto positivo tanto en mi bienestar físico como mental.